Este sitio tiene soporte limitado para su navegador. Recomendamos cambiar a Edge, Chrome, Safari o Firefox.

Cesta 0

No hay más productos disponibles para comprar

Costo sin impuestos Gratis
Antes de los impuestos y gastos de envío.

Su carrito está vacio.

Cómo saber si el vino fue malo y cómo Coravin puede ayudar

IMG Header-Hero-cheers

¿Alguna vez te has servido una copa de vino y te has sentido inseguro? La apariencia, el olor, el sabor... ¿algo parecía... mal? Esto sucede a veces cuando una botella no se almacena adecuadamente, se expone a demasiado calor o luz o tiene el corcho dañado.

En general, todos los vinos deben almacenarse en un lugar fresco y oscuro de lado. Lo mismo ocurre con los vinos a los que se accede con Coravin. Para asegurarse de que todas sus botellas Coravin pasen la prueba, guárdelas adecuadamente antes de acceder a ellas. Después del acceso, continúe almacenando las botellas correctamente y siga las recomendaciones de duración de conservación que se indican a continuación:

  • Pivote: Hasta 4 semanas

  • Eterno: Meses o años si el corcho es de alta calidad.

  • Eterno con tapón de rosca: Hasta tres meses

  • Espumoso: Hasta 4 semanas

Los vinos, especialmente los vinos fríos, a los que se accede con sistemas de vino por copa Coravin Timeless como Timeless Three, Six y Eleven, necesitan un poco más de tiempo antes de almacenarlos. Mantenga las botellas en posición vertical durante un minuto o más para permitir que corcho para volver a sellar.

Cuando se trata de corcho, la calidad varía dependiendo de cuándo y dónde se recogió, así como de las técnicas de fabricación. Además, con el tiempo, los corchos pueden volverse quebradizos, secos y frágiles, especialmente cuando la botella no se almacena adecuadamente.

Cómo saber si el vino se echó a perder

Como no siempre se puede controlar cómo se almacena una botella de vino antes de que llegue a sus manos y como no siempre se puede controlar la calidad del corcho, es posible que el vino se eche a perder antes de llegar a la copa. Dado que probablemente no tengas un perro olfateador de vino, tendrás que aprender a detectar tú mismo los defectos del vino.

Para detectar algunos de los signos reveladores más comunes de un vino en mal estado, comience activando sus tres “sentidos de cata de vino”: vista, olfato y gusto.

1. Vista: Busca defectos en el vino

Observa tu vino. La primera forma de saber si el vino se echó a perder no implica la bebida en sí, sino el corcho. Si notas que el corcho se sale un poco de la botella, significa que el vino se ha sobrecalentado. Además, si un corcho se desmorona o parece desmoronarse, existe la posibilidad de que el vino también esté malo.

Si el corcho está intacto, céntrate en el color del vino. Se puede saber fácilmente cuándo un vino ha perdido su brillo, frescura o color. Si su vino se ve descolorido y descolorido, lo más probable es que esté a punto de beber un vino oxidado. Tanto los blancos como los rojos adquieren un tono marrón cuando se exponen al aire. Sin embargo, tenga en cuenta que un vino añejo tendrá naturalmente un ligero tinte marrón; Los vinos jóvenes, en cambio, sólo pierden color en contacto con el aire.

2. Olfato: huele los malos olores

Si tu vino no huele bien, probablemente sea malo. Si abre un vino esperando un aroma a pan tostado o afrutado pero en lugar de eso huele a sótano mohoso o a cartón mojado, es mejor no probarlo. En este caso, probablemente el vino esté tapado con corcho. El TCA, la sustancia química responsable de ese fenómeno, le da al vino ese olor poco favorable. No le hará daño beber vino con corcho, pero sepa que ciertamente no mejorará cuando se abra.

3. Gusto: El mal gusto sigue al mal olor.

El olfato y el gusto van de la mano, por lo que si detecta un olor extraño cuando sirve el vino, es probable que el sabor también desaparezca. Aquí hay algunas cosas que debe probar: dulzura (cuando no debe ser dulce), sabor a vinagre o sabor ácido. Estas fallas ocurren cuando el vino se deja abierto, cuando se tapa la botella con corcho o cuando la botella se oxida.

4. Textura: busca burbujas.

Por último, pero no menos importante, busque la presencia inesperada de burbujas en su vino tranquilo. Los vinos espumosos obtienen sus burbujas de una segunda fase de fermentación (más información sobre esto en El libro de champán de Coravin), pero los vinos destinados a ser tranquilos, no espumosos, pueden sufrir carbonatación accidentalmente durante el proceso de embotellado.

Al final, confía en tu instinto. Si un vino tiene mal aspecto y huele raro, es probable que se haya echado a perder. Usar el sistema de vino por copa Coravin para conservar las botellas a lo largo del tiempo puede ayudar a evitar que una gran cantidad de vino se vierta por el desagüe. ¿Tienes más consejos? Comparta con nosotros @coravin para ayudar a otros a saber cómo saber si el vino se echó a perder.